Manel Armengol, Raúl Díaz Reyes, Quisqueya Enríquez, Carmen Marical, Xavier Miserachs, Laercio Redondo, Soledad Sevilla, Joaquim Chancho, Regina Gimenez, Mercedes Mangrané, Melvin Martínez, Lucía C. Pino, Àngels Ribé.
Ana Mas Projects es una galería
de arte contemporáneo nacida en 2015 con sede en Barcelona, en el primer piso
de una nave industrial de los años 70. Desde sus inicios, también mantiene una
programación paralela en San Juan (Puerto Rico). Representa una selección multigeneracional de 13
artistas, españoles e internacionales, de los cuales dos tercios son mujeres.
La práctica de estos artistas explora un amplio abanico de medios
que reflejan la diversidad de discursos y narrativas formales y conceptuales que
definen nuestro tiempo, la galería trabaja para apoyar en su visión en un
diálogo con críticos y comisarios, instituciones y coleccionistas, para
impulsar la investigación y el desarrollo de su trabajo. AMP es el resultado de la experiencia acumulada de dos proyectos
anteriores, la galería masART (2004-2012) y la
galería Maserre (2013-2015).
Jueves 15.09:
A partir de las 12h, inauguración para
profesionales / 18h público general
Viernes 16 y sábado 17.09: 11 - 20h
Domingo 18.09: 11 - 15h
‘Un martillo en la cabeza’, la primera exposición en la galería de la artista Damaris Pan que reúne una selección de pinturas recientes pobladas del característico lenguaje de formas, texturas y paletas de colores de la autora vasca y que se
enmarca en el programa del Barcelona Gallery Weekend 2022.
Un martillo en la cabeza surge de una extirpación que Damaris Pan hace del título del tercer capítulo de la serie Berlin Alexanderplatz, de Rainer Werner Fassbinder. Un golpe de martillo en la cabeza puede dañar el alma es el título de Fassbinder al que remite Damaris Pan, y trae a la memoria al onomatopéyico Franz Biberkopf, un personaje grotesco, imagen representativa del lumpen de entreguerras. Un martillo en la cabeza suena también a artefacto ACME, a desenlace de una persecución entre el Coyote y el Correcaminos. Y no lo afirmo porque sí, en la pintura de Damaris Pan hay mucho de todo esto, de onomatopeya y de ironía. Quizás por eso su manera de hablar de pintura se muestre libre de cualquier afectación, porque pese a dejarse el alma en ello, es capaz de definir como cacahuetes unas formas recurrentes que aparecen en sus cuadros, y que en verdad lo son, a veces son cacahuetes, y evocan Las gafas del pintor (1978), de Carlos Alcolea. Recuerdan a ellas porque, en Alcolea, esas gafas aluden a una banda de Moebius que a su vez representaría su visión de la pintura. Una banda sin interior ni exterior delimitado, una superficie no orientable que bien podrían ser esos cacahuetes de Damaris Pan, o los cacahuetes ser un Moebius, una idea de lo infinito rellenado de ese color que hasta hace poco todavía se llamaba carne. ¿Carne de quién? Carne de nadie. Si acaso pieles, que es lo que aflora en cada una de sus pinturas. Pintar cacahuetes para diluir quizás la noción de límite, o quizás para todo lo contario, para crearse esa habitación propia de formas amables, a veces blandas y viscosas, como lo hará Louise Bourgeois, con cuyos carnes tendrá mucho que ver lo de Damaris Pan.
Damaris Pan (Mallabia, 1983, reside y lleva a cabo su práctica artística en Bilbao). Sus obras no se someten a temas concretos sino que tratan de responder a las exigencias del devenir material de la obra desde su propia singularidad, de manera que sus pinturas se vuelven catalizador de interrogantes y cuestionamientos que la interpelan acerca del arte y la vida.
Entre sus exposiciones más recientes destacan la individual ‘Veri Pery’ en Halfhouse (Barcelona, 2022), ‘Cuernos a la Vista’ en BilbaoArte (2020) y ‘Qué morena estás’ en Sala Rekalde (Bilbao, 2018); el duo Sugaar junto a Fiona Mackay en la galería Cibrián (Donostia, 2021), la colectiva ‘Turno de Réplica’ en el Museo Patio Herreriano y comisariada por Javier Hontoria (Valladolid, 2021) y ‘Bi Dos Two’ en Azkuna Zentroa (Bilbao, 2018). Ha participado en diversas residencias como Kunsthochschule Weissensee Berlin (2005), en Art OMI en New York (2018) y en Sichuan Fine Arts Institute en Chongqing, China (2019). Recientemente ha sido galardonada con el Premio Gure Artea 2021, en la categoría de reconocimiento a la actividad artística. Además, en la convocatoria de 2021 ha recibido una de las dos Ayudas anuales a la Práctica Artística APA de Eremuak.
Su tesis doctoral (2014) la defendió desde el desvío como fundamento artístico bajo el título “Lo Bueno, lo Bello, lo Berdadero”. Compagina la creación con el trabajo de docencia en el Departamento de Pintura de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad del País Vasco.